Los productos químicos están en nuestra vida cotidiana en todas partes. Champú, pasta de dientes, muchísimos alimentos, incluso la ropa. Además de contaminar el medio ambiente, el uso de químicos puede ser mucho más amenazante. Por eso ahora, vamos a ver el porque NO DEBES utilizar productos químicos en la jardinería y muchos menos en nuestra huerta.
Los fertilizantes químicos son de acción rápida, a corto plazo para plantas y son responsables de:
la tierra se cuartea por el uso de fertilizantes
- Deterioro de la friabilidad del suelo creando capas compactadas del suelo
- Destrucción de los beneficios de la vida útil del suelo, incluyendo las lombrices de tierra
- Alteran el contenido de vitaminas y proteínas de determinados cultivos
- Hace que ciertos cultivos se vuelvan más vulnerables a las enfermedades
- Impiden la absorción de algunos minerales necesarios para las plantas.
El suelo debe ser considerado como un organismo vivo. Un fertilizante ácido, disuelve el material de sedimentación (compuesto por los cuerpos muertos de los bichitos). Al eliminarlos, los barre y crea una capa compacta de partículas dura como una roca. En vez de penetrar el agua en el suelo, el agua de lluvia termina corriendo.
Por ejemplo, un fertilizante altamente soluble, cuando se diluye penetra rápidamente a las napas del suelo, y muchas veces sin beneficiar a las plantas. Ademas, este producto químico hace que el suelo asuma una dureza similar al cemento.
Cuando está presente en grandes concentraciones, se filtran hasta el subsuelo, donde interactúan con la arcilla para formar capas impermeables, llamada capa dura. Convirtiendolo en una tierra inutil
Muchos fertilizantes químicos artificiales contienen ácidos, como ácido sulfúrico y clorhídrico, lo que aumenta la acidez del suelo. Los cambios en la acidez del suelo (pH) traen aparejados grandes cambios en los tipos de organismos que pueden vivir en dicho suelo.
Las lombrices, agentes importantes en la aireación del suelo, son asesinados.
¿Lo sabias?
Los fertilizantes químicos le quitan a las plantas la inmunidad natural que tienen por matar a los microorganismos en el suelo.
Cuando se le suministran mucho nitrógeno y sólo una cantidad media de fosfato, las plantas son más propensas a contraer infecciones, enfermedades fungosas y bacterianas.
Las plantas cultivadas con fertilizantes químicos artificiales tienden a tener menos valor nutritivo que las plantas de cultivo biológico.
Por ejemplo, en Naranjos, se pudo demostrar que aplicar fertilizantes con grandes cantidades de nitrogeno, produjo naranjas con poca vitamina C. También, en el maíz se ha notado como bajan los valores proteicos del choclo.
Lo mas visto, es como afectan los fertilizantes químicos a que las verduras y frutas carezcan de minerales.
Para explicar esto, tenemos que explicar un poco de física. Si no te interesa, puedes pasar al siguiente párrafo. Las partículas de humus coloidal son los encargados de la transferencia de la mayoría de los minerales. Cada partícula de humus está cargada negativamente y, atrae a los elementos positivos, como el potasio, sodio, calcio, magnesio, manganeso, aluminio, boro, metales de hierro, cobre y otros. Cuando el nitrato de sodio se vuelca en el suelo año tras año, en grandes dosis, un cambio radical se produce en las partículas de humus.
Como hemos aplicado grandes cantidades de iones de sodio(partículas atómicas) estos eventualmente pueden desplazar a los otros iones, por lo que prácticamente no están disponible para las plantas.
El humus se recubre de sodio, saturando los pelos de las raíces con el exceso. Finalmente, la planta no es capaz de recoger los minerales que realmente necesita.
El uso de fertilizantes químicos, produce resultados a corto plazo, pero… tiene graves consecuencias a largo plazo en el suelo, en aguas subterráneas y para nuestra salud.
También se ha demostrado que ciertas sustancias químicas pueden causar enfermedades, defectos congénitos y otros problemas de salud peligrosos. Todo lo que uno tiene que hacer es ver la película “Erin Brokovich” para ver lo que la contaminación química del agua puede hacer a un cuerpo.
El CDC estima que 76 millones de estadounidenses sufren intoxicación por alimentos cada año. Los ingredientes genéticamente modificados se encuentran ahora en un 60 % a 75 % de todos los alimentos EE.UU… Aunque las encuestas indican que un 90 % de los estadounidenses quiere que se coloque en las etiquetas cuales son los alimentos alterados genéticamente, el gobierno y la industria se niega a colaborar.
CONCLUSIÓN:
Los alimentos orgánicos eliminan o reducen al mínimo el riesgo de intoxicación por metales pesados, la ingestión de residuos de hormonas, y la exposición a cepas de bacterias mutantes. También reduce la exposición a insecticidas y residuos de fungicida.
Sin duda, nuestra intencion es crear un buen jardin organico por nuestra propia salud, pero tambien lo hacemos por nuestro planeta.
Los productos químicos hacen que la tierra sea menos fértil. Destruyen parte importante de los ecosistemas naturales del sistema. Todas las plantas y animales, aun los mas pequeños, tienen un propósito, y son eliminados! Al alterar el ciclo de vida natural, estamos poniendo en peligro nuestro medio ambiente en formas que no necesariamente se pueden ver directamente, pero que aun así, sabemos que el peligro está ahí.
Por lo tanto, resulta evidente que evitar los productos químicos, fertilizantes en nuestra huerta orgánica, son la mejor manera de alimentarse y vivir.
