La luteína es un carotenoide natural, esto es, un pigmento, que es quien se encarga de colorear diversos comestibles, pescados, aves y flores. El consumo de este nutriente puede producir beneficios para la salud de la piel, singularmente para la protección contra los efectos de la radiación solar; así como beneficiar la nutrición capilar y de las uñas.
La luteína resguarda la piel contra los rayos ultravioletas, previniendo de esta manera el envejecimiento y el cáncer de piel, entre otros padecimientos. Además de esto, contribuye al mantenimiento y a la renovación de la piel, en tanto que actúa de forma esencial en la inactivación de los radicales libres, y asimismo actúa conservando el colágeno, dejando la piel más sana y con una coloración más uniforme.
Este carotenoide, siendo ingerido, combate a los radicales libres, moléculas inestables producidas naturalmente por las reacciones químicas que ocurren en el organismo. Cuado se encuentran en demasía, estos radicales pueden dañar las células saludables del cuerpo humano, y son considerados como una de las principales causas de padecer cáncer.
La luteína está presente en diferentes vegetales
Conforme la especialista, la luteína es quien se encarga de dar pigmentación amarillenta, anaranjada y rojiza a múltiples comestibles, pero principalmente está presente en vegetales de color verde obscuro. Se puede hallar en:
- la col,
- la espinaca,
- el berro,
- el guisante,
- el maíz,
- el huevo,
- el apio,
- la lechuga,
- la naranja,
- el mamón,
- el melocotón
- y el kiwi, entre otros.
En casos concretos y con la indicación de un profesional, la luteína puede complementarse para combatir el envejecimiento de la piel y otros efectos ocasionados por los rayos ultravioletas. No obstante, se aconseja más su adición en casos de degeneración macular y cataratas, inconvenientes que afectan a la salud de los ojos.
